Aplicar el perfume en los puntos correctos de tu cuerpo es lo que va a ayudar a que no tengas que usar tanto para oler bien y a conseguir un efecto de larga duración, sin tener que aplicarlo de nuevo.
Oler bien es más importante de lo que crees. No solo es una señal de buena higiene personal y de buen gusto, sino que es algo que puede llevar a que causes mejores impresiones en las demás personas y a que puedas construir una imagen poderosa, segura y fácil de recordar.
Y para oler bien no hay que gastar demasiado o recurrir a perfumes de lujo, sino que hay que tener unos cuantos trucos bajo la manga, y saber dónde sí y dónde no se debe aplicar el perfume.
También hay que considerar el tipo de perfume que usas. Hay fragancias que son seductoras, otras son frescas y modernas, unas más son clásicas y también hay fragancias que se consideran elegantes, sofisticadas, maduras, de verano o para el invierno, y elegir correctamente también puede hacer una gran diferencia en tu imagen personal.
No abusar es la primera regla de otro, y la segunda es colocar tu perfume en los puntos correctos.
¿Dónde aplicar el perfume para que dure y huela más?
Los puntos de calor
Si quieres que tu perfume huela más y dure todo el día (y si quieres usar menos para que el contenido de la botella no se acabe rápidamente), entonces es importante que lo apliques en los puntos de calor (puntos de pulso), como el cuello, en la parte interior de tus codos (donde se doblan los brazos), en las muñecas o detrás de tus orejas.
Estas son las zonas del cuerpo que emiten calor, ya que son puntos donde los vasos sanguíneos están más cerca de la superficie, y ese calor tiene un efecto “activador” en tu perfume, lo que hace que el aroma sea más potente y más duradero. Las muñecas, por ejemplo, son partes del cuerpo que mueves constantemente, y ese movimiento también puede funcionar como un difusor para tu fragancia.
Además, debes recordar que no hay que frotar o tallar el perfume cuando lo aplicas, simplemente rocía y deja que se seque, ya que frotar puede afectar o alterar la fragancia.
En la ropa
El perfume no solo se tiene que usar en el cuerpo, colocarlo en algunas prendas de ropa (con cuidado y asegurándose de que esto no pueda causar manchas, o de que pueda llegar a dañar prendas que sean delicadas) también puede ayudar a que el efecto dure más, ya que las fibras de tela absorben el aroma y pueden ayudarte a que tu perfume se amplifique o dure más.
Claro que ese aroma va a desaparecer una vez que laves esa prenda, pero, durante el día, esa prenda puede conservar la fragancia, y esto va a permitir que el perfume se mantenga presente mientras la lleves puesta.
En el pelo
Al igual que con la ropa, colocar un poco de perfume en tu pelo también puede ayudar a que la fragancia sea más potente, en especial porque tu cuero cabelludo también emite calor.
Esto no se debe hacer muy seguido, ya que el uso de perfume en tu pelo puede hacer que se reseque un poco (ya que la mayoría de los perfumes contienen alcohol), pero es un buen truco para ocasiones especiales.
Lo que puedes hacer, según Healthline, es buscar productos como los Hair Mists o los sueros capilares que tengan fragancias, que son sprays diseñados para el pelo y que no contienen ingredientes que puedan llegar a dañarlo.
*gq
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