Muchas verduras pasan desapercibidas y sin reconocimiento a pesar de sus impresionantes propiedades nutricionales. Estos alimentos pueden resultar poco familiares para muchas personas simplemente porque no suelen encontrarse en los supermercados ni en las recetas tradicionales.
Sin embargo, que no sean muy conocidas no significa que carezcan de beneficios para la salud. Algunas de estas verduras son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes que pueden reforzar el sistema inmunitario y mejorar la salud. Por lo tanto, es importante tener la mente abierta y explorar nuevas verduras desconocidas para ampliar el repertorio culinario y beneficiarse de las numerosas propiedades beneficiosas para la salud que ofrecen.
Uno de los mejores ejemplos es el pak choi, un superalimento del que prácticamente nadie ha oído hablar, al menos en España, pero que es toda una maravilla a la hora de poner el organismo a punto.
¿Qué es el pak choi?
El pak choi, también conocido como bok choy, oreja de caballo o col china, es una verdura de hoja verde que ha sido un producto básico en la cocina asiática durante siglos. Proviene de la familia de las brasicáceas, a la que pertenecen otras verduras como el brécol, la col rizada y las coles de Bruselas.
Su aspecto es característico, con hojas de color verde oscuro, gruesas y brillantes, y un tallo blanco y crujiente de textura similar a la del apio. Cuando se compra pak choi – si es que se encuentra –, hay que buscar hojas crujientes y de color verde brillante, con tallos firmes y sin manchas. Para preparar el pak choi, basta con enjuagarlo con agua fría y cortar los extremos de los tallos. A partir de aquí, se puede comer crudo, pero es recomendable cocerlo unos pocos minutos para que su sabor sea más suave y no tan amargo. Se puede utilizar en ensaladas, salteados y sopas.
Un superalimento para huesos, piel y salud
Una de las cualidades más impresionantes del pak choi es el gran abanico de nutrientes que proporciona. Es una buena fuente de vitaminas A y C, así como de calcio y hierro. La vitamina A es importante para mantener sanas la visión, la piel y la función inmunitaria, mientras que la vitamina C es un antioxidante que ayuda a proteger las células del daño causado por los radicales libres, protegiendo así contra el envejecimiento.
El pak choi es prácticamente todo agua, por lo que es bajo en calorías y carbohidratos, lo que lo convierte en una excelente opción para quienes vigilan su peso o sus niveles de azúcar en sangre. De forma paralela, es rico en fibra, por lo que favorece la salud digestiva y mantiene la sensación de saciedad durante más tiempo.
Además de su gran perfil nutricional, el pak choi también contiene compuestos que se han relacionado con numerosos beneficios para la salud. Por ejemplo, el pak choi es rico en glucosinolatos, compuestos azufrados con propiedades anticancerígenas que puede ayudar a reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el de pulmón, mama y próstata. Aunque un exceso de esta sustancia puede llegar a ser tóxico.
Otro punto a favor del pak choi es su capacidad para mejorar la salud ósea. El pak choi es rico en calcio y vitamina K, dos nutrientes importantes para mantener unos huesos fuertes. La vitamina K, que también se encuentra en el brócoli, es especialmente importante para la calidad de los huesos porque contribuye a activar las proteínas que intervienen en la formación y mineralización de los huesos.
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