La col fermentada es una auténtica obra maestra culinaria que no se suele aprovechar todo lo que se podría. Mediante el mágico proceso de la fermentación, la col común se transforma en un superalimento ácido y delicioso repleto de sabor y nutrientes a que también se conoce como chucrut.
Con su característico sabor ácido y su textura crujiente, el chucrut añade un toque diferente a cualquier plato, desde perritos calientes hasta ensaladas. Pero no es solamente su sabor lo que hace tan especial a la col fermentada. También tiene un buen puñado de beneficios para el organismo.
El increíble poder de la col fermentada
Por ejemplo, el chucrut puede ser una opción interesante para todas aquellas personas que quieren bajar de peso. Se trata de un alimento que contiene muy pocas calorías, pero al mismo tiempo aporta una buena cantidad de fibra.
Por otra parte, una de las principales ventajas de la col fermentada es que está repleta de probióticos beneficiosos. Durante el proceso de fermentación, las bacterias naturales de la col se multiplican y producen ácido láctico, que ayuda a conservar la col y le da su sabor característico. Este ácido láctico también crea un entorno en el que pueden desarrollarse las bacterias beneficiosas como Lactobacillus plantarum, Lactobacillus brevis y Leuconostoc mesenteroides. Estos probióticos pueden ayudar a descomponer los alimentos y contribuir a la absorción de nutrientes, lo que puede ayudar a aliviar la diarrea y otros problemas digestivos.
Tener una flora intestinal en perfecto estado de revista es esencial para la salud, ya que desempeña un papel decisivo en la regulación del sistema inmunitario, la producción de nutrientes esenciales e incluso influye en el estado de ánimo y el comportamiento. En este sentido, algunos estudios han indicado que los alimentos fermentados como la col pueden desempeñar un papel en la regulación del eje intestino-cerebro, que se sabe que interviene en la salud mental. Por lo tanto, este tipo de productos se asocian a menor riesgo de depresión y ansiedad.
Introducir col fermentada en la dieta de forma habitual no es oportuno únicamente por sus propiedades probióticas, sino por toda la retahíla de nutrientes que aporta. En este sentido, el chucrut es una buena fuente de vitamina C, vitamina K, folato, todos ellos importantes para mantener una salud óptima. Además, tiene un gran contenido en antioxidantes, que sirven para proteger el organismo de los daños causados por los radicales libres.
Todas estas propiedades, además de la presencia de glucosinolatos – compuestos azufrados que han demostrado tener propiedades anticancerígenas – han hecho que la comunidad científica haya llegado a la conclusión que de col fermentada puede reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, como el de mama o pulmón. No obstante, es importante comprender que el consumo de chucrut por sí solo no es una garantía contra el cáncer, ya que hay muchos otros factores que pueden contribuir al riesgo de cáncer, como la genética, el estilo de vida y los factores ambientales.